jueves, 30 de abril de 2015

Piazza Navona: Llegar, ver y disfrutar

Hola de nuevo!
Como os había dicho en la anterior entrada, hace una semana fui a visitar Piazza Navona, y me gustaría hablaros de ella. Os digo sobre esta plaza que debe ser destino obligado en vuestra visita a Roma, un lugar verdaderamente precioso.
Fui con una idea ya bastante clara de este lugar, lo había visto miles de veces en fotos y por televisión, nada que ver.  Aquello que en ocasiones sucede, de que un lugar que has visto mucho en video o imágenes cuando lo ves en primera persona te resulta exactamente igual, te produce las mismas sensaciones,  esto no pasa en Roma. Y esto no pasa en Piazza Navona.




Desde el primer momento desprende grandiosidad, todo resulta enorme. Recuerdo el momento en que entré a la plaza, está aislada del exterior, es decir, no la ves hasta que no estás dentro, hasta que recorras uno de los estrechos pasillos que llevan a ella. Lo que hace que el contrate de este entorno con sus dimensiones y características te provoque un asombro aún mayor.
Es sin duda uno de los sitios más bonitos que he visto, y el espectáculo que resulta ver la Fontana dei Quattro Fiumi es una sensación increíble. Invita a sentarte a observarla quién sabe por cuanto tiempo.
El ambiente de esta plaza es también muy especial, llena de gente, de artistas de todo tipo (bailarines, magos..) en los que destaca la gran cantidad de pintores dedicados a realizar caricaturas y retratos de la gente que se presta. También los hay que venden sus cuadros relacionados con la ciudad. Y todo esto sumado a la belleza del sitio, a la energía positiva que transmite, hace que sentarte en uno de sus bancos o en alguna terraza de uno de sus bares sea una gozada solo el simple hecho de estar allí. Resulta gratificante ver el rostro de las personas totalmente perplejas y fascinadas disfrutando de la belleza y ambiente de Piazza Navona. Es curioso también, observar ondeando la bandera de Brasil (en la plaza se encuentra la embajada brasileira) en una ciudad plagada de banderas italianas.
La ‘’batalla’’ que se produce en la plaza entre Bernini y Borromini es un auténtico espectáculo que ambos artistas han regalado a la humanidad. Aunque, si observamos la cronología de las construcciones, en realidad esta ‘’batalla’’ en Piazza Navona nunca existió. Se trata simplemente de una leyenda más que interesante, y que de no ser porque la cronología lo desmiente, sería totalmente creíble.
Ver como en la Fontana dei Quattro Fiumi de Bernini hay una estatua tapándose el rostro intentando no ver la iglesia de Sant’Agnese in Agone de Borromini, y como otra se protege de una caída de esta iglesia que parece dar por segura, son los rasgos más visibles de esta rivalidad, que si existía, pero
que en este caso es solo una leyenda. Fascinante. Poder disfrutarlo no tiene precio.


Espero que algún día vosotros también podáis disfrutar de esta maravilla, una de tantas, que nos regala Roma.

jueves, 16 de abril de 2015

El llavero con historia

Hola a todos desde Roma. Mi sueño continúa y me gustaría contaros una pequeña anécdota que me ha sucedido este fin de semana.
Este sábado pasado tenía pensado ir al centro y visitar algunos lugares concretos, entre ellos Piazza Navona, de la que os hablaré en una próxima entrada. Pues bien, resulta que una de mis mayores sorpresas fue un simple llavero. Os pongo en situación.
Mi gusto por Italia viene de años atrás. Un muy buen amigo mío utiliza un llavero que es una pequeña vespa azul con la bandera italiana, es un regalo que le había traído una tía suya de un viaje a Italia. La primera vez que lo vi me encantó el llavero y su historia, y él siempre bromeaba con que tenía un pedacito de Italia y yo no. Desde entonces ese llavero se volvió recurrente en nuestras conversaciones hasta convertirse en un clásico y en un objeto muy preciado.
Pues bien, resulta que el sábado de camino a Piazza Navona me encontré en un puesto este llavero, llevándome una sorpresa más que agradable. Además, me hizo valorar lo que estoy vivieno ahora. Cualquier souvenir como este llavero ahora se torna insignificante, ahora no observo ese pedacito de Italia en forma de llavero, sino que vivo y disfruto cada día en Italia, en Roma, mi ciudad favorita desde que recuerdo. Eso es mucho más bonito que todo lo que pensaba observando aquel llavero.

Roma ha hecho de tan pequeño utensilio un atractivo más, cada día me deja sorpresas tan bellas como esta, que me apetecía compartir.

jueves, 9 de abril de 2015

Roma se vive


Mi nombre es Diego, soy un estudiante de turismo que siempre ha tenido una atracción especial por Italia y, especialmente, por la ciudad eterna, Roma. Desde que recuerdo, Roma es mi ciudad favorita, la que siempre he querido visitar. En cuanto supe que tenía la opción de realizar las prácticas de mis estudios en el extranjero, la Capitale se convirtió en mi objetivo, que por fortuna y con la grandísima ayuda de mi paisano gallego Alberto y su empresa EnRoma, he podido cumplirlo.
Después de apenas una semana como romano, estoy ya establecido y con bastante soltura en la ciudad, Roma no me ha defraudado ni mucho menos, y estoy conociendo esta gran ciudad en su día a día. Y puedo decir que Roma es mucho más que sus recursos turísticos.
He pensado que podría daros consejos de gran utilidad a la hora de realizar vuestro viaje y moveros por la ciudad. Roma es una ciudad difícil y que vive a toda prisa todos los días. Pero no nos bastará demasiado para comprenderla y dominarla, con estos consejos espero poder facilitaros las cosas.
En primer lugar, entiendo que la gran mayoría viene a visitar el centro y todo lo que este ofrece: Coliseo, Fontana, Vaticano, etc. Incluso para e esto, se puede necesitar de varios días.
Una técnica que nos puede ahorrar tiempo y ayudarnos a visitar el centro histórico de manera mas eficaz es trazar una especie de diamante imaginario sobre el mapa, de forma que sus puntas sean Termini, Piazza Spagna, Piazza Navona y Coliseo. De esta forma recortaremos Roma, una ciudad enorme, en un área relativamente pequeña y muy cómoda de recorrer. Dentro de este diamante tendremos el Colosseo, la propia Piazza Spagna, el Foro, La Fontana di Trevi, el Palazzo Vittoriano, Santa María Maggiore, el Panheon…

Fuera nos dejamos recursos muy importantes como Piazza del Popolo, Trastevere o el Vaticano. De tener más tiempo en nuestro viaje no tendremos problema de visitarlas. Además una vez visto el ‘’diamante’’ del que os he hablado no será para nada un problema manejaros por el centro de la ciudad y llegar hasta los recursos que os queden por ver.
De seguro, no todos os alojaréis en el centro de la ciudad. Y obviamente querréis llegar hasta el, lo que se os puede aventurar en tarea difícil, de aquí desemboca el cómo moverse por Roma.
Yo os recomendaría utilizar solamente el metro, es rápido, puntual y conecta con puntos de la ciudad que hace que sea nuestro transporte ideal a en Roma. Este metro tiene la fama de ser muy pequeño y no de muy bueno, es cierto que es una red pequeña pero también muy útil.
Yo nunca había viajado en metro y esto me hacía pensar que igual me costaría lo suyo manejarme en él. Pues bien, bastó un día para dominarlo. Existe un billete de 1,5€ que sirve para un viaje, creo que es el mejor. Debes comprar uno de estos para cada vez que realices un trayecto. El metro tiene dos líneas, A y B, cuyo punto de conexión es Termini. Os recomiendo si podéis evitar esta parada, así como la de Tiburtina, ya que por lo que he visto son de las más recurridas y en las que hay mayores aglomeraciones de gente. La parada del Colosseo por supuesto también lo es pero esta debemos utilizarla.
La zona en la que yo estoy alojado es Tiburtina, por lo tanto me corresponde la línea B, para llegar al centro, cojo el metro en Piazza Bologna (la siguiente a Stazione Tiburtina dirección centro) adelantándome una parada y ahorrandome las aglomeraciones de Tiburtina (ya que no solo tiene parada de metro, sino que también es estación de tren, parada de taxis y tiene próxima una estación de autobús).
Una vez en Piazza Bologna debemos comprar el billete, coger el metro dirección Laurentina y bajarnos en la parada Colosseo, que nos deja justo en el símbolo de la ciudad en cuestión de pocos minutos. Una vez allí, movernos por el centro es muy fácil, ya que llegar hasta el Foro y Piazza Venezia ir todo recto cogiendo a la derecha cuando salimos de la parada de metro. Para volver, simplemente nos dirigimos a la dirección opuesta a Laurentina, y escogemos nuestra parada.
Si vuestra zona se corresponde con la línea A, basta con que vayas a Piazza Spagna, desde ahí podréis visitar el centro en dirección opuesta hacia el Coliseo. Si necesitáis conectar con alguna parada de la otra línea, recordad que el punto de conexión es Termini.
Dirigiéndome hacia otros asuntos, me gustaría deciros que para comprender lo que es Roma, no basta con ver el legado de Imperio, Roma es una gran ciudad con sus millones de habitantes, sus costumbres, su gastronomía, su humor, su forma de vivir, y sobre todo su cercanía. A veces, se nos olvida esto y reducimos una ciudad a lo que queremos ver en ella, esto no nos puede pasar al ir a la ciudad eterna, Roma hay que vivirla, por suerte, ella misma nos lo recordará si nos olvidamos. Roma es mágica.
Por cierto, debo decir que siendo un amante de la ciudad como ya he dicho, y del Coliseo. De momento la cosa que mas me ha impresionnado en la basílica Santa María Maggiore de noche, la vi el primer día que llegué a la ciudad de camino a donde me alojaría. Y verdaderamente me dejó boquiabierto. Es una imagen que difícilmente olvidaré.
Santa Maria Mayor al atardecer

Una cosa que nos ayudará a relacionarnos con la ciudad y su gente, es disfrutar de una de sus costumbres, el aperitivo. Se trata de un buffet que organizan muchos bares entre la comida y la cena, en el cual tomas un refresco o un cóctel por un precio de entre 5-7 euros aproximadamente y puedes comer todo lo que quieras de una gran variedad de platos de la gastronomía italiana.
Otro dato que a muchos os puede ser de gran utilidad es que, si queréis entrenar en el gimnasio durante vuestra estancia, y en un gym que no sea el del hotel sino en uno de la ciudad, debes saber que en la mayoría es necesario presentar un certificado médico que afirme que podéis realizar ejercicio físico. Recordad traerlo!! En caso contrario deberéis ir a un hospital de aquí y pagar para que te den uno, lo que te quitará bastante de tu preciadísimo tiempo.
Os recomiendo además que no solo os centréis en visitar el casco histórico, Roma es mucho más que eso. Existen zonas como San Lorenzo con gran encanto, donde el ambiente se convierte en el mejor recurso. Por eso digo que Roma se vive, yo estoy teniendo la oportunidad de hacerlo y no despreciaré un segundo, también por que aquí el tiempo es muy preciado, ojalá podráis venir y descubrirlo por vosotros mismos.


Os animo.